Cada día es más frecuente el uso de la palabra “Sistema” en el lenguaje habitual, asimismo cada vez es más frecuente asociar esta palabra con el nombre de algunas profesiones, por ejemplo, analista de sistemas, ingeniero de sistemas y otros. Por otra parte, pueden presentarse ejemplos de sistemas mecánicos (computadoras, redes telefónicas, motores); sistemas biológicos (los seres vivos); sistemas sociales (la familia, la educación) y sistemas terrestres (ciclo del agua, placas tectónicas).
El “sistema”, desde el punto de vista científico, se define como una agrupación de elementos relacionados entre sí, naturalmente de manera armónica y articulada. En el campo de la Física, el término sistema, se refiere a un conjunto de cuerpos que interaccionan entre sí y son factibles de se sometidos a acciones internas. Hoy en día, se toma el enfoque Sistémico o Teoría General de Sistemas para dar explicaciones sobre diversos temas.
Los sistemas, sean biológicos, sociales o terrestres se caracterizan por actuar en un ámbito determinado, mediante una estructura u organización establecida, a través de un conjunto dinámico de interacciones que da origen a etapas sucesivas de evolución. Los componentes o partes de un sistema coordinados en su interacción forman un conjunto con características propias para formar un sistema de relaciones mutuas.
Características de los sistemas
Pueden ser varias, de mayor o menor interés y gran utilidad, tales como relaciones armónicas, coherentes y bien articuladas, para que la disposición y arreglo de las partes del todo, o sea la estructura cumpla su parte funcional en su totalidad, que sería determinada por las interacciones para el buen funcionamiento del sistema. Además, deben estudiarse todos los componentes para la producción de un buen trabajo: sinergia.
Los sistemas forman diversas magnitudes, grandes o pequeñas. Así, nuestro Sistema Solar o Planetario, es pequeño, si lo comparamos con otros astros del Universo, constituiría un subsistema, ya que forma una mínima parte de la Vía Láctea, a la cual pertenece, y esta sería un suprasistema más complejo por estar formado por millones de estrellas. La ubicación del sistema corresponde al espacio que se llama ámbito, y por consiguiente, van a originarse relaciones de intercambio para formar parte de un sistema. Todos los sistemas tienen tendencia a la estabilización o equilibrio de sus partes, siempre y cuando no se produzcan perturbaciones, lo que acarrearía la ruptura del equilibrio del sistema. Así, por ejemplo, el planeta Júpiter alteró la órbita de un cometa de mayor trayectoria orbital para reducirla a otra menor. La entropía es la tendencia de los sistemas a desgastarse, a desintegrarse, para el relajamiento de los estándares y un aumento de la aleatoriedad. La entropía aumenta al pasar el tiempo. Si aumenta la información, disminuye la entropía ya que la información es la base de la configuración y el orden. A partir de esta entropía surge la información como medio o instrumento de ordenación del sistema.
La homeostasia es el equilibrio dinámico entre las partes del sistema. Los sistemas tienen una tendencia a la adaptación con el fin de alcanzar un equilibrio interno frente a los cambios externos del entorno, confiriéndole capacidad evolutiva pasando por fases sucesivas de estabilización y equilibrio, produciéndose en esas fases una serie de transformaciones.
De esta manera una organización será comprendida como un sistema o subsistema, un suprasistema, dependiendo del enfoque que construyamos. El sistema total es aquel representado por todos los componentes (partes) y relaciones necesarios para la realización de un objetivo, dado un cierto número de restricciones.
Teoria De Sistemas from monchopaz
La Tierra
como sistema
Los
modelos: No todos los sistemas tienen las mismas características y, nos conducen
a valernos de leyes y modelos que permitan generalizar y anunciar los
acontecimientos futuros. Para favorecer el estudio de los sistemas se recurre a
un conjunto de signos convencionales que representan las relaciones de
intercambio, interacción y equilibrio propios del sistema en
consideración, de forma tal que sea posible su representación y estudio. Esta
representación es lo que se conoce como MODELO. Un modelo puede ser una
maqueta, un esquema, un gráfico o un conjunto de ecuaciones matemáticas, esto
depende de dos criterios: el sistema a representar y de las relaciones que se
deseen representar.
Nuestro Planeta Tierra, un cuerpo celeste
relacionado con otros planetas girando alrededor del sol, tienen el mismo
origen cósmico y forman parte: el Universo Espacio Sideral, constituido por
materia sólida, líquida o gaseosa, pasando por diversos estados, ligados
íntimamente al sol por la Ley
de la
Gravitación Universal , para formar un sistema armónico y
articulado que se conoce con el nombre de Sistema Solar o Planetario, que forma
una mínima parte de la Vía
Láctea. Por lo tanto, no puede permanecer aislado, por formar
parte de un todo. No solamente a lo que a su origen se refiere, sino a las
influencias recíprocas, y al indispensable potencial de las radiaciones
solares como fuente de energía y vida. El Planeta Tierra como modelo
de sistema se puede ubicar en el Sistema Solar; posee una estructura organizada
en cuatro geosferas y mantiene interacciones gravitatorias y radiantes con los
demás cuerpos del sistema.
Cada una de las geosferas (litosfera, atmósfera,
hidrosfera y biosfera) conforman un subsistema dentro del planeta y se
encuentran relacionadas unas con otras, lo que le da al planeta una característica de planeta dinámico.